Aprende a valorar las estaciones del año

“En lo más profundo del invierno, finalmente aprendí que dentro mí existe un verano invencible” - Albert Camus

Y nada más cierto de la realidad en Noruega, donde el invierno en Oslo puede sorprendernos con veinte grados bajo cero. Si, leyeron bien: -20°. ¿Cuál sería el pensamiento de muchos de ustedes frente a esta realidad innegable? “Me quedo adentro viendo como nieva, comiendo chocolate y mirando películas todo el invierno”. Pero esto sería posible, si no fuera que esta estación dura cuatro meses aproximadamente y que necesitamos ir al supermercado para comprar el chocolate, y por supuesto, salir a trabajar para pagar las cuentas.

¿Qué hacen los noruegos? Los noruegos salen a la calle, al bosque o la montaña sin importar el clima. Disfrutan de la nieve esquiando o haciendo muñecos,  caminan con amigos, celebran olimpiadas y se dan chapuzones en el mar durante el verano. Las escandinavas no se esconden bajo la ropa en el invierno, si no que por el contrario, desafían el clima gélido con minifaldas que a otros harían temblar de frío. Aquí hay un dicho popular que dice: “No existe el mal tiempo solo mala ropa”. Y doy fe que es cierto, porque yo misma dije: “No hace frío, cuando la temperatura subió de menos quince a menos un grado”.

Una actitud para valorar y replicar de estas tierras es la de crear rutinas saludables.

Tips para sacar el máximo provecho de cada estación del año en cualquier lugar del planeta donde nos encontremos:

  1. Crear rutinas saludables: tomar fotos, practicar nuevos deportes (esquí, patinaje, natación, ir al gimnasio, bailar), organizar eventos sociales y/o religiosos,  participar de un coro, aprender un nuevo idioma, etc.
  2. Aceptar la estación en plenitud: significa conectarse con el momento presente, y evitar hablar continuamente del tema, sobre todo cuando las temperaturas son extremas.
  3. Frecuentar gente positiva: se dice que nos parecemos a las cinco personas con las que más compartimos nuestro tiempo.
  4. Descansar y comer alimentos de estación: aquí las manzanas son una delicia en el otoño y los frutos rojos son increíbles en el verano.
  5. Ponerse en movimiento: está comprobado científicamente que realizar actividad física aunque sea simplemente caminar, impacta positivamente en nuestro cuerpo y en nuestro sentido del humor.
Para quienes viven en climas fríos, comer chocolate amargo es un placer permitido por los beneficios que conlleva. El chocolate negro estimula la producción de serotonina en el cerebro, la cual es la hormona de la felicidad. Cuando estamos tristes o levemente deprimidos por cuestiones estacionales,  un chocolate mejorará el estado de ánimo. Además nos brinda energía y ayuda a equilibrar las hormonas femeninas.

Resumiendo todo lo anterior,  en Noruega hay una expresión que dice “Ut på tur, aldri sur! lo que traducido significa, “¡Sal caminar y nunca tendrás mal humor!”


Comparto con ustedes los encantos del otoño noruego:









Y a vos, ¿Qué es lo que más te gusta de la estación que estás viviendo ahora?

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